Ride!!

Empecemos la semana con una reseñita cinematográfica, después de todo en eso habíamos quedado ¿no?

GHOST RIDER

Bueno, hay que ser justos y empezar diciendo que Ghost Rider no tiene una trama particularmente buena o una historia complicada; tampoco está cargada de referencias para los fans ni profundiza en los personajes centrales de una manera psicológica y tridimensional. No hay frases memorables, de hecho, la dialogación en general raya en lo mala. Las actuaciones están sólo bien, nada del otro mundo, incluso Eva Mendes deja bastante qué desear, siendo sus escotes lo más destacado de su interpretación. Sí, Nicholas Cage se ve rarísimo con pelo y en momentos sobre actúa un poco.

Y aún así, disfruté muchísimo la película. El por qué se limita a dos simples palabras.

Ghost Rider…

Así es, el personaje en sí mismo vale el boleto, los efectos visuales son sin duda lo más aplaudible del filme y claro, el Motociclista es sin duda lo mejor a nivel visual de tooooooda la cinta; se ve poderoso, mágico, oscuro; la actitud, el movimiento, el fuego… ¡la moto!

Seguramente los realizadores saben que su carta fuerte es el efecto del Raider, y no tienen empacho en explotarlo a lo largo de la historia, resultando cada momento más emocionante que el anterior. Eso sí, mención especial para la secuencia de 'La Cabalgata"... no tiene ni poquitititititititita progenitora.

Fan, fan, fan… realmente se sacaron un 10 con los efectos.

Sí, quizá la peli se quede en la categoría “palomera”, pero en definitiva es una excelente opción si quieres desconectarte un rato e irte a divertir al cine.

¡Cuando sea grande quiero ser un Espíritu de la Venganza!