Días en los que el horizonte ha cambiado su color radicalmente. Mucha ruido mental, opciones, prisas y mucho, pero mucho estrés.
El mundo parece no colaborar para respirar en paz y pensar las cosas en silencio. Entre bloqueos, plantones, lluvias, inundaciones, un trafico enloquecido, náufragos sospechosos e incertidumbre electoral, mi México Mágico parece estar en un peor momento que yo; agitado, molesto, confundido.
Es un momento de duda, de cambios y básicamente un toque sazonador de caos en cada esquina, en cada cabeza.
Y en medio de todo esto, me llega esta imagen...
Una Supernova.
El estallido de una estrella masiva en su etapa final, fue observada y capturada por primera vez en directo por un equipo británico-estadounidense.
Y entonces recuerdo lo pequeños que somos; lo diminuto de nuestros conflictos existenciales comparados con el universo. Qué poco caso tiene complicarnos la existencia así.
Entonces respiro, admiro la foto completa.
Y tomo mi decisión en silencio.
Ojalá les pueda regalar un segundito de paz. Saludos.
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