01 agosto 2011

Escenas

Todo comenzó de una manera casual, inocente... casi improvisada.

Entonces las cosas comenzaron a intensificarse un poco. Al principio parecía algo normal; así son estas cosas ¿no? Uno comienza a sentirse más cómodo, más suelto. El tono sube gradualmente y la distancia personal comienza a desvanecerse.

Se sumaron poco a poco elementos cada vez más fuertes. Las palabras, la duda, la cercanía de unos labios, el enojo, el temblor... el brillo en los ojos.

De mí, de ella...

Y la respiración se intensifica. Pasión, ira, arranques, ternura, pasión otra vez.

"¿Qué es lo que quieres?" decía una y otra vez, al tiempo que me preguntaba lo mismo en la cabeza... en el alma.

Se rompió el aliento, el contacto y con él... el ensayo inesperado.

...

Dioses... cómo extraño el teatro...

3 comentarios:

Anónimo dijo...

increíble! lograste transportarme por completo.... me encanta como escribes!

The GriFter dijo...

amigo si el teatro se le da rebien....cabron escribes increible

Korkuss dijo...

Gracias Anónimo, aunque no sea quién seas. Eres bienvenid@ cuantas veces quieras.

Compadreeee! Me gustaría tenerme la fe que me tienes tú. Te quiero ca!